miércoles, 29 de agosto de 2012

Capítulo 23

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-Narras tú-

Ya era lunes y me encontraba en la terminal, esperando que llegara mi mejor amiga Angie, junto con Zayn y Harry, que se habían ofrecido a acompañarme. Hace mucho tiempo que no veía a mi amiga de cabellos ondulados y gran carácter, la extrañaba demasiado.
Los demás chicos no habían venido, y aquí les voy a contar el drama de la cosa: finalmente descubrimos con quien había estado Liam tan confundido, con Eleanor, una de las ex de Louis. Debo decir que esto no me causa demasiada gracia, para empezar, Liam y Eleanor habían estado chateando durante 3 meses seguidos, en los que ella estuvo de vacaciones en Francia, y ayer había vuelto de su viaje. Liam, al saber esto, cortó con Danielle, para que la chica no tuviera más cuernos de los que ya tenía. Ahora, Liam y Louis están en la casa de Eleanor, contentos por su regreso.
Louis me dijo que no tenía de que preocuparme, que Eleanor tan solo era una gran amiga de él, que su relación no había funcionado, pero yo me temía lo peor.
Todos mis problemas pasaron a segundo plano cuando vi a Angie bajar del avión. No tardó demasiado al verme y, cuando lo hizo, corrió hacia mí y nos fundimos en un gran abrazo, como solíamos hacerlo cuando vivíamos cerca.
Angie: ¡No puedo creerlo!
Luego de millones de abrazos, le presenté a los chicos, a los que ya conocía, pero como yo, no escuchaba su música. Noté el rubor de sus mejillas al saludar a Harry, quien también se sonrojó, parecía que después de todo, Harry si conseguiría una novia.
La semana esa pasó rápido, lo de Liam y Eleanor no iba muy bien, debido a que ella se la pasaba todo el tiempo de acá para allá con Louis, y la verdad que lo mío con él tampoco iba muy bien. Me limitaba a no pensar mucho en ello, trataba de levantarle un poco el ánimo a Liam, salíamos casi todo el tiempo juntos al cine, o al shopping. Perrie había logrado calmar sus celos, y ahora nos llevábamos bastante bien, parecía una buena chica después de todo. Angie y Harry se habían puesto de novios al primer día que se conocieron, lo que la verdad no me sorprende ya que desde el primer momento en que se vieron hubo algo.
El viernes fue el verdadero problema, el día en el que todo se destruyó. Me tocaba hablar con Niall, ya no podía seguir posponiendo el asunto, estaba en graves problemas.
Tú: Niall…- le dije, mientras él se preparaba un sándwich en la cocina.
Niall: ¿Sí?- dijo con la boca llena.
Tú: es hora de que hablemos- se quedó quieto, seguramente nunca me había visto tan seria.
Le conté todo, desde que fuimos chicos, hasta lo que había pasado recientemente, sin dejarle meter un solo bocado en la conversación. Las palabras de mi boca salían rápidamente, tal vez debido a que todas querían ser pronunciadas.  Terminé y lo miré, Niall parecía al borde del colapso, lloraba a más no poder, y me miraba con los ojos llorosos, y con rabia.
Niall: ¡Y nunca me dijiste nada!- me gritó.
Tú: lo… lo siento…- ni siquiera sabía que responderle, las lágrimas inundaban mis ojos.
Niall: ¡No te creo!
Dicho esto, abandonó la casa, y me dejó llorando en el suelo. Me sentía muy mal, se lo había dicho abruptamente y todo había salido terriblemente. En esos momentos, lo único que quería era ir a ver a Louis, y explicarle lo mal que me sentía, él siempre me levantaba el ánimo.
No puedo explicarles lo mal que me sentí cuando abrí la puerta de la habitación de Louis, y me lo encontré besándose con Eleanor. Él ni siquiera me vio, y fue mejor así.
Subí a mi habitación llorando más de lo que podía ser real, Angie me escuchó y corrió a mi ayuda, aunque estuviera con Harry, ella siempre me ayudaba en todo. Liam y Zayn, que estaban mirando una película, también vinieron a socorrerme. Les conté todo a los tres, sobre Niall y sobre lo que había visto en la habitación de Louis. Liam se sentía un poco dolido, pero dejó eso de lado para ayudarme.
Tú: lo único que quiero, es un boleto a ______(tupaís).

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